Empieza el mes de agosto y nuestros clientes nos piden que les activemos en sus buzones electrónicos el consabido mensaje de respuesta automática «fuera de la oficina». El aviso que normalmente nos solicitan es uno de los ejemplos de mayor ironía y sarcasmo que existe en la relación con el cliente o proveedor.
El mensaje empieza con llevar en el asunto la frase:
- Fuera de la oficina
Que quiere decir:
- Te fastidias que éste no te lo voy a responder
A continuación el correo:
- Perdón por las molestias. Estaré fuera de la oficina del lunes 04 de agosto hasta el jueves 18 de agosto, sin poder acceder al correo electrónico. En caso de tratarse de algo urgente, por favor póngase en contacto con mi compañera Carlota Pérez en cperez@micompañia.com. Responderé a su mensaje cuando regrese.
Todo este correo traducido por partes:
Perdón por las molestias: Significa literalmente: “Jódete si te pica”.
Estaré fuera de la oficina, en lugar de Estaré de vacaciones, que no se pone para no escuchar a la vuelta que si has estado de vacaciones que si no atiendes a los clientes por dejarlo todo para estar con tu familia, que hay otros muchos que estarían siempre al pie del cañón y un montón de frases que nos oímos todos los años de los clientes más pesados.
Desde el lunes 04 de agosto hasta el jueves 14 de agosto. ¿Unos 10 días? No, serán en total 16 días. Significa en verdad que estaré fuera de la oficina desde el viernes 1 por la tarde hasta que vuelva el 18 a trabajar, pero es mucho mejor minimizar los días que estás fuera de la oficina para no aparentar un total abandono del trabajo y que los clientes no saquen impresiones equivocadas, porque al final no pararán de recordarte que estuviste un montón de vacaciones, aunque sólo desaparezcas unos días al año.
Sin poder acceder al correo electrónico. ¿Hoy en día quién no puede acceder al correo si quiere? Pero preferimos no saber cómo se hace o simplemente queremos poder desconectar del todo de la rutina diaria.
Póngase en contacto con mi compañera Carlota Pérez. No es una posibilidad es un ruego de que lo hagan para que así cuando vuelva será un trabajo menos que tenga acumulado en mi mesa. Y de paso nos regodeamos sobre la pobre Carlota que se queda al pie del cañón mientras nosotros desaparecemos. A no ser que Carlota también esté de vacaciones, y que también tenga la respuesta automática activada y redirija sus correos urgentes a otro de la oficina y así se sigan sucediendo un sinfín de correos automáticos de respuesta.
Responderé a su mensaje cuando regrese. Cuando regrese tendrá en la bandeja de entrada una retahíla de cientos de correos sin leer, con lo que la posibilidad de que no se responda a ese correo es muy alta.
Por cierto, el Lunes 18 me voy de vacaciones y no sé cuándo volveré, a lo mejor recibes un correo automático de mi buzón con el asunto: Fuera de la oficina 😉